Daniel Valdés M.

Data Analyst, Physics Teacher, Astronomer, Proto-Writter

En el corazón de la enseñanza y el aprendizaje - lo que yo llamo “aprendanza” - se encuentra la búsqueda constante de mejora, la comprensión de quienes somos y el lugar al que pertenecemos. Tras 15 años dictando clases, creo que independiente de la disciplina que impartas como docente, es lo único que realmente importa a quienes tienes a tu cargo, tus estudiantes. Por esta razón, hoy quiero presentar tres libros que considero fundamentales para cualquier persona que se enfrenta a los retos de la pedagogía moderna y quiere ser parte de ese universo que está lleno de dificultades: “Piensa rápido, piensa despacio”, “Hábitos Atómicos”, y “¿Por qué dormimos?”.

Desvelando Nuestros Sesgos: Una Llamada a la Conciencia Pedagógica

En “Pensar rápido, pensar despacio”, Daniel Kahneman nos introduce en el fascinante mundo de nuestro pensamiento dual: el intuitivo (Sistema 1) y el analítico (Sistema 2). Este libro no es solo una ventana a la comprensión de nuestros sesgos como humanos; para nosotr@s, quienes estamos vinculad@s a la educación, es una herramienta esencial que desafía y enriquece nuestras prácticas pedagógicas.

La Influencia de los Sesgos en la Educación:

Kahneman expone cómo nuestros sesgos y procesos de pensamiento, a menudo ocultos a nuestra propia vista, configuran nuestras percepciones y decisiones. Esta revelación es vital para quienes forman parte de un ambiente educacional. Me pregunto, ¿hasta qué punto nuestros juicios rápidos afectan la forma en que evaluamos y respondemos a los estudiantes/pares/superiores? Un estudio de la Universidad de Stanford (Gross, 2017) ilustra cómo los sesgos inconscientes de los docentes pueden influir en las expectativas y el rendimiento académico de los estudiantes. Esto me lleva a reflexionar sobre la importancia de reconocer y mitigar estos sesgos para fomentar un entorno de aprendizaje que no solo sea más justo y equitativo, sino que también incluya las variables del autoconocimiento, los datos y la conciencia en la toma de decisiones.

El Valor de la Reflexión y la Toma de Decisiones Conscientes:

La obra de Kahneman resalta la importancia de equilibrar nuestro pensamiento rápido e intuitivo (Sistema 1) con el análisis más lento y deliberado (Sistema 2). En el ámbito educativo, esto sugiere una revisión profunda de nuestras prácticas pedagógicas. ¿Cuántas de nuestras decisiones educativas diarias son producto de este “pensamiento rápido”? Investigaciones en el campo educativo indican que una mayor reflexión y conciencia en nuestras acciones pueden llevar a prácticas de enseñanza más efectivas (Hansen, 2020). Esta idea resuena profundamente conmigo, destacando la necesidad de cuestionar y ajustar continuamente nuestra forma de enseñar para mejorar el aprendizaje de nuestros estudiantes.

“Nuestra consoladora convicción de que el mundo tiene sentido descansa sobre un fundamento seguro: nuestra capacidad casi ilimitada para ignorar nuestra ignorancia.”

Daniel Kahneman, “Pensar Rápido, Pensar Despacio”.

Hacia una Educación Más Justa y Equitativa:

Este libro no solo ilumina la complejidad de la mente humana, sino que también nos proporciona un camino hacia prácticas pedagógicas más reflexivas, empáticas y efectivas. Al entender y trabajar con nuestros procesos mentales, podemos evolucionar como educadores y crear un entorno educativo donde cada estudiante tiene la oportunidad de alcanzar su máximo potencial.

Cultivando Hábitos Sostenibles en Educación: Más Allá de la Inmediatez

James Clear en “Hábitos Atómicos” nos brinda una guía práctica y poderosa para entender y transformar nuestros hábitos. Este libro trasciende el ámbito personal y resuena profundamente en la esfera educativa, especialmente en un momento donde el agotamiento docente y la falta de planificación a largo plazo son temas críticos.

La Trampa de la Inmediatez y la Gestión del Tiempo:

En mi experiencia y observaciones, muchos educadores viven atrapados en un ciclo de respuesta inmediata a las demandas diarias, dejando poco espacio para la reflexión o el crecimiento personal y profesional. Clear argumenta convincentemente la importancia de los pequeños cambios constantes, que eventualmente conducen a resultados significativos. ¿Cómo podemos, como educadores, aplicar esta filosofía para mejorar nuestra enseñanza y bienestar personal? Un estudio de la Universidad de Harvard (Knight, 2018) demuestra que la adopción de hábitos productivos y la planificación consciente pueden reducir significativamente el estrés y aumentar la eficacia en el trabajo.

“Si quieres mejores resultados, entonces olvídate de establecer metas. En cambio, concéntrate en tu sistema. Uno no se eleva al nivel de sus metas. Cae al nivel de sus sistemas.”

James Clear, “Hábitos Atómicos”.

Desarrollando Hábitos Positivos en la Educación:

La lectura de “Hábitos Atómicos” me lleva a preguntarme: ¿estamos, como comunidad educativa, valorando la importancia de desarrollar y mantener hábitos saludables y sostenibles? ¿Cómo podríamos incorporar estas enseñanzas en nuestra práctica diaria para construir un entorno de trabajo más equilibrado y enriquecedor? Este libro nos desafía a alejarnos del caos de la inmediatez y a avanzar hacia una práctica pedagógica que valora y fomenta el bienestar a largo plazo.

Hacia una Cultura Educativa más Reflexiva y Efectiva:

“Hábitos Atómicos” no es solo un manual para el cambio personal; es un llamado a repensar cómo estructuramos nuestro tiempo y energía en la educación. Clear nos muestra que la adopción de pequeños pero consistentes hábitos puede ser revolucionaria, llevándonos a una enseñanza más consciente y gratificante. Es un recordatorio poderoso de que el cambio duradero comienza con pasos pequeños pero firmes, tanto dentro como fuera del aula.

Revalorizando el Sueño en la Educación: Un Despertar Necesario

En su libro revelador, Matthew Walker nos abre los ojos a la crítica importancia del sueño, un aspecto a menudo subestimado en nuestras vidas y especialmente en la educación. “¿Por qué dormimos?” no es solo un estudio sobre el sueño; es un llamado urgente a reevaluar nuestras prioridades y hábitos como educadores.

El Impacto del Sueño en la Efectividad Docente:

Observando la realidad educativa, me preocupa ver cómo el descanso adecuado es frecuentemente sacrificado por la carga de trabajo. Walker enfatiza que la privación del sueño afecta severamente nuestras capacidades cognitivas y emocionales, algo que no podemos ignorar en una profesión tan exigente como la enseñanza. Un estudio de la Universidad de California (Turner, 2019) resalta que la falta de sueño en los educadores no solo disminuye su eficacia en el aula, sino que también afecta su salud y bienestar general. ¿Estamos, como educadores, priorizando correctamente nuestro descanso?

El Sueño y su Relación con el Aprendizaje y la Salud Mental:

Este libro me hace reflexionar sobre cómo el sueño, o la falta de él, impacta nuestra labor educativa. Walker nos muestra que un sueño adecuado es fundamental para el procesamiento de la información y la regulación emocional. ¿Cómo puede esto cambiar nuestra aproximación a la enseñanza y el aprendizaje? ¿Estamos subestimando el poder del sueño en la preparación de nuestras clases y en la asimilación del conocimiento por parte de los estudiantes?

“Si llevas al médico a un niño que duerme mal y le describes estos síntomas sin mencionarle la falta de sueño, el doctor no te dirá que tu hijo duerme demasiado poco, sino que tiene un TDAH (trastorno por déficit de atención con hiperactividad)”

Matthew Walker, “Por qué dormimos”.

Hacia una Cultura Educativa que Valora el Descanso:

“¿Por qué dormimos?” nos desafía a transformar nuestra percepción del sueño. En la educación, esto significa crear un entorno que no solo valore el descanso y la recuperación, sino que también los promueva activamente. Imaginemos escuelas y universidades donde el bienestar de los docentes y estudiantes sea una prioridad, reflejándose en horarios y cargas de trabajo razonables. Este libro nos invita a ver el sueño no como un lujo, sino como un componente esencial de una pedagogía efectiva y humanizada.

Entre Estrellas y Aulas: Transformando la Educación con Conciencia, Hábitos y Descanso

En el mundo de la pedagogía, al igual que en la astronomía, la problemática del sueño se manifiesta de una manera peculiar, pero igualmente perjudicial. La realidad de muchos profesores, dedicando horas fuera de su contrato laboral para cumplir con exigencias administrativas, revisar trabajos o ingresar calificaciones, es un reflejo de un sistema que descuida el bienestar de sus educadores. Esta carga de trabajo adicional, exacerbada por herramientas institucionales insuficientes, no solo disminuye la eficacia pedagógica, sino que también erosiona la salud y el bienestar de los docentes.

Esta falta de respeto hacia el tiempo y el esfuerzo de los educadores contribuye a un problema aún más grande: el descuido del sueño. Muchos docentes, atrapados en una maraña de responsabilidades mal gestionadas, pierden de vista la importancia de los hábitos saludables, incluyendo aquellos que promueven un descanso adecuado. Esta situación se agrava por una falta generalizada de autoaprendizaje y desarrollo personal, debido principalmente a la escasez de tiempo y energía. “¿Por qué dormimos?” de Matthew Walker no solo destaca la importancia crítica del sueño para nuestra salud y rendimiento, sino que también ofrece un urgente recordatorio de que el bienestar de los educadores es fundamental para el éxito de sus estudiantes.

Además, la problemática se extiende a la organización y la gestión del tiempo. “Hábitos Atómicos” de James Clear podría ser una luz en el camino para muchos educadores, proporcionando estrategias para cultivar hábitos que mejoren la organización personal y profesional. Estos hábitos no solo podrían ayudar a los profesores a gestionar mejor su carga de trabajo, sino también a encontrar el tiempo necesario para el descanso y el autoaprendizaje.

Sin embargo, el desafío no termina ahí. La incapacidad de reconocer y abordar los sesgos, tanto en los docentes como en los directivos, perpetúa un ciclo de desigualdad y falta de comprensión en el aula. “Piensa rápido, piensa despacio” de Daniel Kahneman nos invita a reflexionar sobre cómo nuestros procesos de pensamiento pueden influir en la reproducción de problemas sociales dentro del entorno educativo. Este reconocimiento es esencial para romper el círculo vicioso que afecta principalmente a los estudiantes.

Mi experiencia en el ámbito educativo, observando estos patrones destructivos, me ha convencido de la necesidad urgente de un cambio profundo. La integración de los conocimientos y estrategias presentados en estos libros en la formación y práctica docente podría ser el primer paso hacia la creación de un entorno educativo que valore y promueva el bienestar de todos sus participantes. Al adoptar un enfoque más consciente y equilibrado, es posible transformar la educación en Chile, priorizando el bienestar de los educadores y, por ende, de los estudiantes.

Este testimonio no solo refleja mi recorrido personal y profesional, sino que también es un llamado a reevaluar nuestras prioridades educativas. Al enfrentar estos desafíos con nuevas herramientas y perspectivas, podemos comenzar a construir un sistema educativo más justo, saludable y efectivo.

Reimaginando la Educación: El Viaje de Aprendanza a través de Sueño, Hábitos y Conciencia

Al reflexionar sobre las enseñanzas de “Piensa rápido, piensa despacio”, “Hábitos Atómicos” y “¿Por qué dormimos?”, me veo inmerso en un proceso de redescubrimiento y transformación que va más allá de mi identidad como astrónomo y educador. Estos libros han actuado como catalizadores, no solo desafiando mis propias prácticas, sino también ofreciéndome una visión renovada de lo que podría y debería ser la educación en Chile.

La aprendanza, ese delicado baile entre enseñar y aprender, se presenta no solo como un ideal a aspirar, sino como una necesidad urgente dentro de nuestro sistema educativo. Este concepto, que ha guiado mi camino a través de ambos mundos, el astronómico y el pedagógico, me ofrece ahora un marco para integrar las lecciones profundas de estos tres textos en un llamado a la acción para mis colegas educadores y para el sistema en su conjunto.

La transformación requerida en la educación chilena no es menor; demanda un replanteamiento radical de cómo valoramos el sueño, cómo organizamos nuestras vidas y prácticas docentes a través de hábitos saludables y cómo nos enfrentamos a nuestros propios sesgos para crear un ambiente de aprendizaje más justo y equitativo. La aprendanza nos invita a considerar que el acto de enseñar no puede disociarse del acto de aprender, tanto para los estudiantes como para nosotros mismos, los educadores.

En este momento crítico, donde los desafíos parecen abrumadores y las soluciones esquivas, los principios contenidos en “Piensa rápido, piensa despacio”, “Hábitos Atómicos” y “¿Por qué dormimos?” ofrecen un faro de esperanza. Nos recuerdan que el cambio es posible, que el bienestar de los educadores es inseparable del éxito de los estudiantes, y que un enfoque más consciente y equilibrado en la educación no es solo deseable, sino esencial.

Por lo tanto, este testimonio es más que una reflexión personal; es una invitación a mis colegas, a los directivos escolares y a los responsables de la política educativa, a embarcarse en un viaje de aprendanza conmigo. Juntos, podemos trabajar para transformar la educación en Chile en una experiencia que valore y promueva el bienestar integral, la justicia y la efectividad. La hora de actuar es ahora, guiados por la luz de la aprendanza, hacia un futuro donde la educación libera todo el potencial humano, tanto de los estudiantes como de los educadores.

Hasta el próximo cronopunto del Principia 🥚.

DV

Referencias